MANTRAS: Son sonidos
primordiales, sonidos raíces o semillas, sonidos sagrados que enfocan
y sosiegan la mente.
MAN significa mente y TRA instrumento y protección.
Un mantra puede ser una sílaba, una palabra, una
frase o texto largo, que al ser recitado y repetido va llevando a la
persona a un estado de profunda concentración.
Su intención es la de poner a la persona que lo
pronuncia en resonancia con el sonido raíz que se entona.
Un mantra es una “vibración” sonora que ayuda a
liberar nuestra mente de las influencias de la propaganda, pesadillas y ansiedades
que se acumulan en ella, sirven para enfocar y sosegar la mente. Y SE CARACTERIZAN por la concentración en la repetición
del sonido, todos los demás pensamientos se desvanecen poco a poco hasta que
la mente queda clara y tranquila.
LOS MANTRAS, POR REPETICIÓN, CALMAN LA MENTE Y
LA LIMPIAN.
La Invocación es algo diferente a un mantra.
INVOCAR (Del lat.
invocāre). Significa: demandar ayuda mediante una súplica vehemente. Acogerse a
una ley, costumbre o razón.
INVOCACIÓN (Del lat. invocatĭo, -ōnis) 1. Acción y
efecto de invocar. 2. Palabra o palabras con que se invoca. 3. En ciertos
poemas, parte en que el poeta pide inspiración a una deidad o musa.
Invocar es literalmente el uso de la voz para atraer la atención de otra
conciencia.
LAS AFIRMACIONES O DECRETOS: Son
mandatos espirituales.
Toda sustancia, sea de Luz o de materia, obedece las
órdenes del Verbo. Es una Ley Universal.
Cuando utilizamos una afirmación, de manera repetida y
continúa, con la adecuada visualización e intensidad de sentimientos, logramos
producir una fuerza capaz de mantener, impregnar y fijar imágenes positivas
dentro del aura, afectando nuestro Campo Energético y todo lo que nos rodea.
Pero hay una intención de “INVOCACIÓN” en esto y en eso se diferencian de los
Mantras.
El universo responde a tus sentimientos… y tus
palabras son un reflejo de las vibraciones que estás transmitiendo.
Las afirmaciones positivas nos permiten REPROGRAMARNOS
y elaborar nuevas REDES NEURONALES que cambian la vibración que emitimos y nos
sintonizan a vivir en un estado de abundancia, paz y conexión.
Debemos aprender primero a CALLAR para luego poder
HABLAR
Recuerda siempre: “Que tus palabras sean más
importantes que el Silencio que rompes”
Cuando el agradecimiento se transforma en oración
constante, adquiere el poder de triunfar sobre los estados mentales negativos
que envenenan la vida. Así que la invitación es a convertir tu expresión verbal
en un continuo de afirmaciones de agradecimiento por TODO en tu vida.
Conny Méndez Estévez
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