viernes, 19 de marzo de 2021

CITAR LA FUENTE… PLAGIOS… ROBOS DE IDENTIDAD O DE LAS PUBLICACIONES Y ACTIVIDADES DE LOS DEMÁS.



De hace un tiempo para acá, y eso me ha llamado mucho la atención, he visto como hay personas que publican cosas muy buenas en las diversas redes pero no citan la fuente, omiten el nombre del autor (no sé si es intencionadamente).

He leído comentarios y he escuchado acerca de personas que afirman algo así cómo que “todo es canalizado” y por eso, según ellos, la autoría no tiene importancia.

 

También he encontrado denuncias de personas a las que les han plagiado todo tipo de cosas, hasta sus talleres y actividades con los mismos nombres y contenidos, basados en una retorcida interpretación pseudo espiritual de “todo conocimiento está en el campo etérico o energético…” o lo que se les antoje, y por eso “no es de propiedad” de nadie. ¿Y entonces? ¿Qué les pasa? Cómo leí en otro comentario “¿Tienen atrofiado el chakra de la creatividad y por eso no les queda más remedio que apropiarse indebidamente de la creación de otras personas sin citar las fuentes?” Sería interesante que se detuvieran a reflexionar porque entonces no recibieron ellos directamente para desarrollar esos conceptos, textos, actividades…

 

Eso es "ROBAR" aunque lo disfracen de lo que se les antoje. Y acumula una deuda energética o karma importante. Las personas que insisten en publicar cosas sin citar la fuente están actuando desde la más profunda ignorancia, pues tarde o temprano recibirán en sus vidas el pago de esa factura pendiente.

 

Es muy frecuente recibir este tipo de cosas en los grupos de las redes como Facebook y en los chats de WhatsApp. Así que procura preguntar por el autor para que colabores a crear el hábito en las personas que comparten.

 

Personalmente he utilizado y utilizo diversas herramientas en mis actividades, pero siempre cito la fuente, le cuento a mis grupos donde y con quien lo aprendí. Les comparto lo que a mí me ha funcionado y puede ser de algún libro o de alguna experiencia personal. Reconocer, nombrar, citar la fuente es agradecer lo que recibimos. Cuando no lo haces no estás agradeciendo. Y si no sabes la fuente pues simplemente agregas “Desconozco el autor”.

 

Te voy a hacer otra comparación. Simplemente imagínate que durante un tiempo ahorras o pides un préstamo y te compras tu vivienda. Entonces llega otro y se apropia de tu casa.

 

Es muy hermoso que multipliques y expandas sabiduría, conocimiento, poesía, música, todo lo que mejore la vida de las personas que te rodean, pero agradece a sus autores reconociéndolos y citando la fuente, por algo todo eso les fue entregado a ellos directamente.

 

Gracias Amada Presencia por todos esos seres maravillosos a través de los cuales te manifiestas, y gracias a todos ellos por compartirnos tus maravillas.

 

Conny Méndez Estévez 

@connyhadafloral

(Imagen de Educación 3.0)

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